Podrán los gringos con sus Mil cañones
hacernos garras con sin par furor,
pero hacernos doblar nuestras rodillas...
¿Eso sí que no!
Verán nuestros fuertes hechos polvo
y de ruinas humeantes un monton,
pero hacernos gritar: ¡Vivan los gringos!
¡Eso sí que no!
*tomado de el libro Mier un pueblo mágico por la gracia de su historia, escrito por el profesor Enrique Maldonado Quintanilla